Un delito ocupacional es aquél que lleva a cabo un empleado en contra de la organización. Varía desde irregularidades administrativas y éticas hasta delitos criminales. Un delincuente ocupacional se percibe a sí mismo como una persona honesta y decente, ya que racionaliza sus actos.  Es percibido de la misma forma por sus superiores y colegas.

Prueba periódica de honestidad

La prueba periódica de honestidad se utiliza para identificar colaboradores honestos y potencialmente deshonestos o deshonestos en las organizaciones.

La prueba mide cinco factores relevantes:

• Tendencia a la delincuencia ocupacional: Es el resultado de la combinación de los motivos del empleado respecto al involucramiento en acciones deshonestas y sus comportamientos habituales de discernimiento, sensatez y moderación dentro de la organización.
• Lealtad hacia la compañía: Este factor corresponde a los comportamientos habituales del colaborador frente a los objetivos de la organización y las responsabilidades profesionales. A mayor riesgo en este índice, menor es el compromiso que tiene el empleado con su sitio de trabajo.
• Actos deshonestos: Refiere actividades criminales y/o deshonestas en las que pueda o haya estado involucrado el colaborador en su sitio de trabajo actual.
• Vicios: Identifica si la persona evaluada presenta adicciones en el consumo de sustancias ilícitas, alcohol o en juegos de azar.
• Situación Financiera: Este parámetro evalúa la situación económica del colaborador.

Prueba Poligráfica Periódica

La evaluación poligráfica permite determinar si el colaborador dice la verdad o miente en las preguntas relevantes formuladas sobre determinado caso concreto.

Se analizan y comparan distintas gráficas respecto a las reacciones fisiológicas no controladas por el cuerpo humano. Estas reacciones son graficadas antes, durante y después de cada pregunta para determinar la veracidad o falsedad de cada respuesta, es de alta utilidad en casos de investigación, en selección y evaluación de personal.